Sin duda alguna, los grandes acontecimientos fatales que la Humanidad ha tenido que enfrentar a lo largo del tiempo, han sido de grandes magnitudes causando tremendos daños materiales, económicos, humanos y ecológicos.
Hoy el Covid-19, un virus desconocido y con una rapidez extraordinaria de infección, se ha convertido en un actor altamente peligroso que está poniendo en jaque el futuro del mundo y del ser humano.
Esta enfermedad ha causado una pandemia, ocasionado cientos de miles de muertes en diferentes continentes y puesto al mundo en cuarentena por su capacidad de infección. Por esta razón, el Covid-19 no es la excepción como un acontecimiento fatal por sus manifestaciones y crudeza para causarle daño al ser humano y debilitar economías. Ha cambiado el statu quo del mundo entero que se ve rebasado en su conocimiento de cómo manejarlo y aprovechar su potencial para usarlo en favor de la humanidad.
El elemento más crítico que tienen este tipo de acontecimientos son el factor sorpresa. Sorpresa cuando se presenta, sorpresa en cómo funciona, sorpresa de cómo se controla, sorpresa de sus tremendos impactos, entre otros.
El ser humano para sobrevivir siempre ha tenido la disyuntiva de “adaptarse o morir”, también llamada la Regla de Oro, la cual se hace extensiva a todas las etapas de cambio del ser humano.
Aquí me referiré y extrapolaré esta Regla de Oro al sector inmobiliario para sobrevivir en nuestro trabajo del día a día bajo esta circunstancia del covid-19, donde siempre se ha privilegiado el contacto y la empatía con los clientes. Los acompañamos desde el asesoramiento, visitando con ellos la propiedad, a la hora del cierre en la firma de la escritura en la notaría y por último brindando con ellos en su nueva casa como propietarios por este excelente acontecimiento.
Sin embargo el covid-19, llegó y ha impuesto reglas totalmente contrarias a nuestro amable y amistoso y profesional protocolo para hacer negocios: desde no darse la mano, mantenerse a 1.80 mt de distancia, usar tapabocas, no trasladarlos en tu vehículo, lavarse las manos y otras tantas recomendaciones de higiene las cuales cada día son más estrictas.
Y ahora el mundo se pregunta ¿qué hacer o cómo hacer?
Por lo que es momento de aplicar la Regla De Oro: adaptarse o morir.
Cada quien lo aplicara a su nicho de trabajo y yo lo haré para el sector inmobiliario.
Desde hace años ya contamos con las benditas redes digitales que para la gente de esta generación, ya cuentan con una gran ventaja desde su concepto y uso. A pesar de que hasta hoy, se utilizan más para socializar que para temas de trabajo, existen esquemas de plataformas en línea más estructuradas y mejor concatenadas para lograr llegar al consumidor final en mercados más distantes.
Aquí en este punto y en este momento se abre una gran área de oportunidad para la sobrevivencia de las empresas inmobiliarias: aquellas que mejor y más rápido se adapten a los nuevos modelos tecnológicos podránm sin importar distancias ni idiomas, llevar sus mejores ofertas en bienes raíces a los diferentes segmentos económicos, edades y gustos ya sea para vivir o como inversión.
Hoy se tiene la gran oportunidad en el sector inmobiliario de migrar a sistemas más y mejores integrados, ya que teniendo del producto y su tipo (casas, departamentos, oficinas, casas de playa, del sector, plus medio o económico) podamos ser capaces de seleccionar a los mercados meta, para enviar de forma digital nuestras ofertas, y captar clientes a través de las diferentes plataformas digitales, y utilizar un CRM (Custumer Relationship Management) para agendar todos los compromisos y acuerdos con el cliente.
Generar sesiones de trabajo con el cliente para presentarle el proyecto o aclarar dudas, mostrarle virtualmente la casa o desarrollo y generar los compromisos de cierre y revisión de la documentación para escrituración, todo a distancia en la mayoría de los casos, incrementará la eficiencia y ampliará los alcances del mercado meta.
Será la velocidad de cambio la que determine su pleno dominio y éxito de las empresas inmobiliarias que hoy como casi a todos los sectores de la economía nos sorprendió con el cambio de usos y costumbres.
Queda claro que la tecnología está reclamando su espacio en todos los procesos de la vida humana y así será en forma creciente y acelerada de aquí en adelante.
Y tú, ¿qué eliges?
– RAMON FRANCO LOPEZ ( DIRECTOR BABEL GROUP)
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