Son muchos los tesoros escondidos en la península de Yucatán. Entre ellos destacan las lagunas rosadas, cuyo color tan singular ha tomado a internet por sorpresa, disparando así la popularidad de estos sitios.
La laguna más cercana a la ciudad de Mérida es la Salinera de Xtampú, ubicada entre las localidades de Telchac y Dzemul.
Dos años atrás un grupo de pescadores decidió dejar las redes y dedicarse al cultivo de sal, fundando así la cooperativa Meyah Ta’ab (‘trabajadores de la sal’, por su traducción del maya). Desde entonces la cooperativa no sólo cosecha la sal, también limpia la laguna y recibe a los turistas. El cultivo artesanal de la sal es un proceso que se remonta a las poblaciones mayas que poblaron originalmente la zona, tradición de la que los actuales trabajadores se encuentran muy orgullosos de continuar.
El color rosado viene de las altas concentraciones de sal en el agua y a la presencia de un crustáceo llamado artemia salina. La presencia de flamencos en la zona es muy común debido a que se alimentan de estas pequeñas criaturas.
La entrada es completamente gratuita, pero se puede apoyar a la cooperativa comprando la sal que se produce ahí mismo, la cual se vende a 10 pesos el kilo (.52 centavos de dólar americano). La cooperativa también se mantiene del comercio de su sal con algunas tiendas locales.
Se puede llegar desde la ciudad de Mérida tomando la carretera a Progreso y de ahí seguir rumbo al puerto de Telchac. Es apenas una hora de viaje en automóvil.
Muy cerca, también se encuentra la zona arqueológica de Xcambó y varios restaurantes de mariscos, además de las bellas playas de Telchac. Sin duda se trata de un paseo imperdible.
